Sunday, January 29, 2006

Y Control.





Ese es muy muy bueno señor, se lo recomiendo cien por ciento. No no no, como se le ocurre le hago un buen precio por los dos digamos, ya que los dos cuestan $4.500, se los dejo en 8 lucas. ¿Le parece caro todavía? Bueno, pero no le cuente a nadie, ud me cae bien ¿sabe? Tiene un algo, si es mucha mi intromisión ¿Cuál es su nombre? ¡Vargas! Yo conocí a un general llamado Vargas, era simpático, pero cuando tenía que ser pesado, viera ud, se me ponían los pelos de punta (en ese entonces tenía pelo). Pero ud no es pesado, no. Hace poco me encontré con él. Siendo sincero, yo lo daba por muerto. Es que tanta cosa que pasó mijo por dios. Estaba en el supermercado comprando carne con su hija (jovencita, buena para mi hijo) lo saludé, se le veía demacrado al pobre, es que tanto que tuvo que vivir que llega a dar angustia. Se emocionó al verme ¡imagínese, al general emocionado! Eso no se ve todo los días, tan solo a generales prófugos, mata-patria. Hablamos harto rato, estaba medio preocupado, por todo esto de los procesamientos y cosas así, esa época. Pero en todo caso me dijo que él participó en uno no más y fue a la fuerza, de todas maneras ya estaba muy viejo, unos años más que yo (si, aunque no lo crea, tengo mis años) para que lo procesaran. Yo no alcancé, por suerte a participar en todo eso, doy gracias a dios todos los días. Mi madre vivía en Venezuela y estaba muy mal de salud, fui a acompañarla en sus últimos días, de ahí no quise volver, ya había estallado todo esto. Me salvé menos mal, aunque llegué un par de años después, y viví lejos de Santiago, Puerto Montt para que vea. Cuando llegué tenía pegadito el acento y todito, hasta en la manera de caminar. Tuve arrastre con las mujeres, claro, tuve mi momento de gloria, hasta que conocí a ésta Gloria, ¡viejita saluda! Llevamos más de 30 años casados y soy feliz. Nos conocimos en una plaza, en esos tiempos eran el centro social, no como ahora, en donde los malls, esos centros horriblemente grandes son el..eh, centro. No me gustan esos lugares, muy caros. Me quedo con el apumanque (es un mall lo se, pero mas de mis tiempos), aunque ahora todas las tiendas son para esas lolitas que muestran el ombligo como locas, pero hay algunas que salvan, que son para nuestra edad, me refiero a mi y a mi viejita, ud es carne fresquita. Así es la vida ¿no? Nos van desechando.¡Ay! Disculpe, tan parlanchín que soy ¡y ud se tiene que ir!, que pena. Se los dejo en 7 lucas, pero no le diga a nadie ¿ya? ¡Vieja! Dame cambio, mira que no tengo. Listo señor Vargas ahí está, que goce los libros. Adiós.

[ mi momento pela cable podría haberse llamado, pero cagaría la temática o algo así...creo, que bah ]

Wednesday, January 18, 2006

Mint Car.



La arena, olas, sol y gaviotas. Hombre y mujeres con lentes de sol. Esculturas moldeadas a mano en trajes de baño llamativos y brillantes, todos/as con una sonrisa deslumbrante e incandescente. Sus pieles color canela (en algunos casos carbón) a todo sol, para demostrarle al ministerio que los rayos desde las 11 hasta las 3 no son cancerigenos. Hombres con tabla bajo el brazo y mujeres haciendo porras desde la orilla. Y la infaltable música de fondo proporcionada por tu walkman. Todo un videoclip, de esos alegres-pimpin-perrea-hot. Y todo es perfecto, porque pasaste de ser la típica cara familiar a la novedad. Tu hoja de vida se anula, y eres otro, sin que nadie note el cambio. Porque el verano tiene ese toque que me encanta, el anonimato. Nadie sabe quien eres ni para quien trabajas, ni tu promedio ni que diplomas "sacaste". Te vistes con un pareo y les sonries a todos sin esperar respuesta, porque te crees el cuento. Eres dueño y señor de la playa y de todos sus horizontes. Te olvidas de lo que dejaste atrás para ir adelante. El aire salitrero se convierte en un perfume delicioso y el cuchufli en un manjar escaso. Hasta te tomas el descaro de coquetearle al dueño de los taca-tacas dejandote 4 fichas a $200. Porque a pesar de que tu ficha en dicom sigue vigente, todo se congela y el tiempo transcurre a una velocidad envidiable. Un paraíso terrenal abierto a tus pies, Just Like Heaven.

Sunday, January 15, 2006

So Real. Jeff Buckley



Colonias es la suma de varios factores como: rayos UV altamente cancerigenos, jugos de dudosa procedencia, canciones como "hey bogui bogui", pronunciar nombres impronunciables, preguntas incómodas, maguereos con bomberos incluidos (chorro también), reggeton en exceso y el más importantes, esas caritas sonriendo, las que corren cuando te ven en la entrada de la puerta y que te dan abrazos sin prevención alguna.
Porque ahora me doy cuenta de que los extraño, a pesar de que se enojen conmigo porque nunca pude conseguir greda (se agota rápido) y porque tampoco conseguí pure. Pero a pesar de todo, me seguian sonriendo, dibujos y cartas, cajas con palos de helado y firmas en mi polera.
En 5 días les tomé un cariño enorme, porque en 5 días podría decir que las conocí a la perfección, y en un día me tuve que despedir de todo eso. Y no me gusta decir adiós, pero se fueron esperanzados. El saludo final es alegre con un toque de melancolía, el manguereo un suplicio a que sea eterno. Pero me fui contenta, porque logré lo que tenia en mente.
Sacar sonrisas. Porque no somos distintos, sino, iguales en todo punto de vista. Aunque uds quizás no lo sabían.
Ojalá las vuelva a ver Javiera, Jazmín, Silvana (con amigas y prima incluida), Tahía, Geraldine, Deyanire, Tamara y Johnatan (a pesar de que fuiste un dia).



* Foto auspiciada por mi prima, aunque ella no sepa. :P

Monday, January 02, 2006

Como un rayo de sol.

Esperaste el silencio de todos, hasta quedarte solo. Cerraste los ojos, mientras de a poco, bajabas el ritmo. Lento, cada vez más lento. Hasta que el último soplo, te agarro como tu querías, de la mano hacía montañas de tierra, sobrevolando el trigo.
Te odié tanto, por hacerme creer que aún respirabas detrás de ese vidrio. Por irte antes de lo previsto.
Todas las lágrimas derramadas jamás serán suficientes. Las sonrisas se me hacen hipócritas y las lamentaciones, una justifiación inútil a tu partida. Porque todavía extraño tus preguntas de la nada. Tus frases con humor. Yo se tata que no te lo ganó, porque si tu hubieras querido, te habrías levantado de ese estado. Envuelto en sábanas, con ojeras profundas y con la piel pegada a los años. Pero fue tu decisión. Un pésima decisión.
Te quise tanto viejo y nunca lo supiste. Te admiré tanto y jamás te enteraste. Porque pudiste repetir la historia, pero fuiste conciente. No tenías mucho, pero diste muchísimo más.
Y ahora nos limitaste a los retratos y recuerdos. Porque a un mes de tu partida, la herida debería empezar a cerrar, pero me doy cuenta que eso será imposible. Y en el campo, esperaré tu llegada triunfal, con poncho y chupaya en mano. Tocando la campana, para avisarle a tu juana que llegaste a bailar. A bailar ese pié de cueca que todavía esta pendiente. Te quise, te quiero y siempre te querré, viejito lindo.
Salud.
Fue entonces, cuando sentí el sabor de lo amargo y lo triste de tu partida.

PD: Conoscan a Indalicio del Jesus Parraguez Parraguez. Mi tata.

"Picar y arrancar"